Era Clase del Intercambio

Hoy, como será de costumbre esta semana. Nos reunimos con nuestros compañeros de montclair a eso de las 14.00 hrs. Én nuestro taller de trabajo.

Iniciamos el día con un training físico-vocal por nuestro profesor Gabriel Díaz, nos dispusimos en el espacio y buscamos conectarnos con nuestra respiración, tomando conciencia real de ella y su paso por nuestro cuerpo. A medida que comenzamos a equilibrar la ansiedad del cuerpo y la respiración, comenzamos a imaginar raíces en nuestros pies que comenzaron a ramificarse de tal manera que atravesaron el suelo imponente para conectarse con las raíces de cada uno de nuestros compañeros y así luego de tomar conciencia de mi interior, tomo conciencia de lo que ocurre alrededor buscando siempre conectar con tu presente y con tus compañeros. Seguimos buscando nuestro ritmo propio de respiración ahora tomando conciencia de la gravedad y dejamos nuestra cabeza caer para sentir su peso y así orgánicamente bajar lentamente vertebra por vertebra y volver a subir constantemente. Hallando un ritmo propio. Luego de haber variado los ritmos con los que trabajamos. Nos permiten desplazarnos por el espacio liberando nuestro cuerpo y conectándolo directamente con nuestros compañeros. La mirada es fundamental es la ventana del alma dicen algunos y hoy nuevamente lo compruebo. Si miras fijamente los ojos de tus compañeros los primeros minutos, Quizás sea raro, difícil dejar de pensar en tu cuerpo, en tu respiración. Para ahora preocuparte solo de entrar en tu compañero, entrar en su pupila y buscar una conexión. luego de varios minutos es complicado despegar tus ojos de tu compañero. Luego aparece el sonido, internamente para después liberarlo y conectar con otro, desplazándonos por el espacio sin perder el contacto con tu compañero. Es inevitable la conexión que se genera, algo evita que dejes de mirar, de observar, de tratar de percibir las sensaciones que expresa el cuerpo y la mirada de tu compañero. Luego de alcanzar tal nivel de intimidad, abrimos la mirada al colectivo y el sonido emitido se conjuga y se vuelve uno. Mantuvimos la mirada con cada uno de los integrantes del ejercicio hasta que en determinado momento nos juntamos en el centro percibiendo a través del cuerpo la vibración y el sonido de cada uno hasta tranquilamente encontrar un final en conjunto.

BREAK…

Nos cambiamos a un nuevo taller donde lo que hicimos fue seguir las instrucciones de la profesora invitada de montclair Debbie. Nos pidió buscar una hoja y un lápiz y escribir 3 listas diferentes. La primera fue escribir 50 cosas que describan lo que somos. Luego escribir 50 cosas de lo que no somos. Y finalmente 15 cosas que harías antes de morir. Al terminar de escribir todo. nos pidió que no sentáramos todos juntos al fondo de la sala y el ejercicio consistió en ir uno a uno y pararse al frente del grupo y decir solo una cosa, de las tres listas. Lo que ocurrió fue interesante, algunos mencionaron cosas evidentes, mientras otros fueron mas allá y algunas se oyeron como confesiones y anhelos. Fue un ejercicio liberador y unificador para el grupo. Inevitablemente nos permitió saber un poquito mas de nuestros pares.

Finalmente el día concluyo con el primer acercamiento al texto que escogieron para nosotros, Neva de Guillermo Calderón. Leímos el primer monologo y decidimos que ese es el que utilizaremos para trabajar e incorporarlo a todos los ejercicios que hemos desarrollado hasta el momento. Así terminó nuestro tercer día junto a nuestros compañeros de montclair.